La fecha fue elegida para recordar el "evento Tunguska", cuando un
asteroide impactó violentamente en Siberia el 30 de junio de 1908.
La iniciativa, además, pretende sensibilizar sobre la importancia de seguir invirtiendo para estudiar y rastrear estos cuerpos celestes, que de los más de 750.000 que existen en el sistema solar, 1.800 tienen órbitas "cercanas" a la Tierra, y según astrónomos "el peligro de impacto es real".
La fecha elegida recuerda el "evento Tunguska", cuando un asteroide impactó violentamente en Siberia el 30 de junio de 1908, causando graves incendios de árboles en un área de 2.150 kilómetros cuadrados, rompiendo ventanas y haciendo caer a personas a 400 kilómetros de distancia.
Tras el "evento Tunguska" las noches eran tan brillantes en partes de Rusia y Europa que se podía leer tras la puesta de sol sin necesidad de luz artificial.