
Se trata del primer exoplaneta potencialmente habitable conocido por la Humanidad. Poco importa que Gliese 581 g termine siendo en realidad un infierno como Venus o un desierto congelado como Marte. Si lo pensamos detenidamente, la verdad es que sería mucha casualidad que precisamente el primer mundo rocoso que descubrimos orbitando en la zona habitable de su astro sea un vergel cubierto de océanos y bosques. Pero aunque las condiciones de Gliese 581 g resulten ser finalmente incompatibles con la vida, lo importante es que ahora muchos han tomado conciencia de que cada vez está más cerca el día que descubramos una Exotierra. Gliese 581 g nos recuerda las maravillas que nos ofrece la ciencia y la astronomía: literalmente, miles de mundos por descubrir nos aguardan ahí fuera
Recreación artística de Gliese 581 g. Crédito: NASA / Lynette Cook