El nombre de Vía Láctea proviene del Latín y significa camino de leche. Fue denominada así por la apariencia de banda lechosa de luz tenue que atraviesa el cielo nocturno de lado a lado. Según la mitología griega, su origen sería leche salida del pecho de Hera, la esposa de Zeus. Esta banda no es más que la luz emitida por el conjunto de estrellas que forman el disco galáctico.